Cuando Brigitte Bardot llegó a Armaçâo dos Búzios, ningún carioca daba un real por un lugar desolado en el litoral de Janeiro. Era una lengua kilométrica de playas rocosas sin interés en las rutas turísticas. BB ya era famosa, pues acababa de estrenarse Y Dios creó a la mujer, y su llegada, si bien en un principio pasó inadvertida,Sigue leyendo “Búzios, el paraíso de la Bardot”